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Si quieres dar lo mejor de ti mismo y aportar valor a tu cliente debes crear una estrategia y averiguar cuales son las necesidades de este.
Cuando tienes un negocio local pequeño el trato con el cliente es fundamental para que éste vuelva y sea fiel a ti. Sin esto es muy probable que no pase nunca más por tu puerta, y si lo hace, no entrará.
Te voy a mostrar 9 formas de aportar valor a tu cliente y fidelizarlo.
1. Debes saber que ofreces a tu cliente
Necesitas descifrar que necesitan de tus productos y de que forma lo que ofreces puede aportar valor a tu cliente.
Entiéndele, pregúntale y preocúpate de que aquello que necesita se lo puedas dar.
Hazte la siguiente pregunta: ¿Por qué el cliente ha entrado en mi negocio?
¿Por un bonito escaparate? ¿esa oferta irresistible que le ofreces? ¿por un descuento si trae a otra persona?
2. El cliente debe recordar que ha entrado en tu tienda
Si viene y se va sin más, tienes un gran problema. Te falta atracción en tu local y un negocio físico no se mantiene sin clientes habituales. Estoy seguro que tienes algo que darle y que pueda recordar.
¿Qué puedes ofrecer diferente a tu cliente?
- Para empezar, deberíais preguntarle que es lo que desea y si puedes ayudarle.
- Para aportar valor al cliente identifica en que eres bueno
- Ofrecer atención personalizada.
- Hablarle por su nombre cada vez que viene.
- Preocuparte por él si ves que está diferente de la otra vez que vino.
- Tener sillas donde sentarse (si es que tus clientes esperan de pie).
- Finalmente, darle la oportunidad de leer alguna revista mientras espera.
3. Necesitas ser mejor que tu competencia
Puesto que hay decenas de negocios en Roses que ofrecen lo mismo que tu, investiga un poco que ofrece tu competencia. Pero fíjate en aquello diferente a lo que ofreces tú. Algo habrá que les haga destacar. Enfócate en aquellos negocios mejor situados que el tuyo o a la par.
Si ves que hay algo distinto e incluso mejor, intenta mejorarlo. No lo copies. Eso es muy importante. No queremos copias, buscamos la diferencia.
Debes poder crear algo que destaque por encima de tu competencia.
Pongamos que eres un restaurante que ofrece un menú de 12 euros. Tu competencia ofrece lo mismo que tú. Lo único que cambia son los platos.
Procura algo distinto. ¿Cómo te desmarcarías de ellos?
Una forma de aportar valor a tu cliente sería introducir refrescos de botella pequeña en el menú y si ya los ofreces que sean de tamaño grande. Podrías incluir una tapita de aperitivo, un chupito tras el postre. Algo diferencial.
Podrías optar por un mejor trato e intentar fidelizar a clientes que veas temporalmente a través de alguna oferta exclusiva. Aquí entrarían los típico obreros del edificio de al lado o los profesores del instituto de enfrente.
4. Sorprende a tu cliente
Dale algo que le pille por sorpresa. Puede ser ese chupito tras el postre. Aportar valor a tu cliente de forma que no se lo espere es de lo más efectivo que hay. El cliente es la parte más importante, esencial, en tu negocio. Debes cuidarlo y mimarlo, aunque no siempre sea el cliente deseado.
5. Ofrece un servicio adicional
Imagina que ofreces un servicio de masajes. Por lo tanto si tienes un cliente habitual o alguien que viene una vez al mes y te gustaría que viniera más deberás plantearte alguna estrategia, ¿no?.
Si quieres fidelizar a este cliente e aumentar las ventas de tu negocio local no te queda otra que ofrecer algo distinto.
¿Qué podrías ofrecerle distinto a lo que le ofreces ahora?
- Un descuento del 25% el próximo día que venga.
- Un descuento del 50% en otro tipo de masaje.
- Regálale un servicio de menor precio que te compense.
- Una tarjeta donde por cada 10 masajes le regalas uno.
6. Fideliza a tu cliente
Aportar valor a tu cliente será más que necesario para que sea fiel a ti. Necesitas que se sienta como en casa. No vale con dejarle en el porche, debe sentir que puede abrir la nevera de tu casa.
Debes ganarte su confianza, ¿y cómo puedes ganarte la confianza de un cliente?
- Dile la verdad siempre. No le engañes. Un cliente estafado no volverá y muy probablemente no te recomendará.
- Se transparente. Sé auténtico. No ofrezcas algo que sabes que no necesitará.
- Sé amable con él. Debes darle lo mejor de ti. Tu mejor servicio. Debe sentirse único.
7. Habla con tu cliente
A veces cuesta hablar con personas que acabas de conocer y con las que no encuentras nada en común. Un cliente es una persona que ha venido a tu negocio buscando algo, háblale sobre ese algo. Pregúntale qué le hizo venir, qué espera de ese producto, cómo puedes mejorarlo.
Estáte atento a lo que dice, puedes encontrar temas de conversación en ello.
Pero si vas a estar un buen rato con ese cliente lo que no debes hacer es no decirle nada, se sentirá incómodo. Tampoco le hables del tiempo, seguramente ya lo habrá hecho con 10 personas más.
8. Busca otros medios para contactar con tus clientes
Para ello necesitarás descubrir antes quien es tu público objetivo. Así estudiarás a tu cliente ideal y tendrás los medios para saber que herramientas utiliza.
Por ejemplo, las redes sociales pueden ser una de las mejores vías para mantener contacto con tu cliente de forma habitual. Prueba en aportar valor a tu cliente a través de las redes sociales. Tienes Facebook, Instagram o Twitter. Alguna de estas redes sociales será indicada para tu tipo de negocio.
- Ofrece a tu cliente ofertas por esas vías de contacto.
- Recomienda productos tuyos que puedan interesarle y que sean novedosos.
- Preocúpate por todo aquello que necesitan.
- Pregunta si puedes ayudarles en alguna cosa.
- Hazles saber acerca de las novedades de tu sector.
- Crea contacto a través del email con Email Marketing.
- Crea una página web y un blog y ofrece valor a través de él.
9. Si el cliente te necesita, debes estar ahí
Si cuando te necesite un cliente no estás, éste se irá a otro negocio, proveedor, etc. No puedes fallarle. Por lo tanto, si tienes abierto un correo de contacto, contesta a tu cliente y en caso de que tengas establecido un horario de atención telefónica de 9 a 13h deberás contestar.
Deberías establecer unas normas desde un principio si no quieres tener que acarrear con esas consecuencias. Por eso te recomendaría que de buen principio no garantices que vas a estar disponible al 100% en todo momento.
Aportar valor a tu cliente debe ser una obligación para ti
Por lo que si no das lo mejor de ti, no dudes en que otro lo hará. Tu cliente debe sentirse especial y para ello debes crear situaciones provechosas para ambos. Lleva a tu cliente a donde tú quieres, siempre con amabilidad y respetando su opinión.
Nunca obligues a un cliente a hacer algo que no desea.
Y tú, ¿qué estrategia utilizas para aportar valor a tu cliente? ¿qué haces para hacerle sentir bien y que vuelva? puedes responder en los comentarios.
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